La investigadora en cuestión se merece mis respetos en general. Su frase es penosa, pero más penosa me parece la carta pidiendo "un procesador", a secas, en el aire, hecha por gente que sí sabe la diferencia entre procesador (en general) y word (en particular).
la inv. es cat. I, titular en su facultad, y toma una decisión interesante: decide renunciar al incentivo. Y es muy cierto que peor que el .exe no hay...
4 comentarios:
En defensa(?) de la investigadora(?) hay que decir que ese .exe es aun peor que el word!!
La investigadora en cuestión se merece mis respetos en general. Su frase es penosa, pero más penosa me parece la carta pidiendo "un procesador", a secas, en el aire, hecha por gente que sí sabe la diferencia entre procesador (en general) y word (en particular).
la inv. es cat. I, titular en su facultad, y toma una decisión interesante: decide renunciar al incentivo. Y es muy cierto que peor que el .exe no hay...
Recuerdo una decisión similar y muy sonora hace unos años, tenía guardado por ahi el mail con la carta de renuncia.
El Word es una obra de relojería suiza al lado del programa somosunosinutiles.exe
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