Un cazador cree ver un oso. Camina diez pasos hacia el sur, apuntando en esa dirección con una escopeta. Como no lo ve, gira y camina diez pasos hacia el oeste, con su escopeta descansando en el antebrazo izquierdo (sigue apuntando al sur). Frena, y camina diez pasos hacia el norte, con su escopeta en el hombro apuntando hacia atrás. Dado que regresó al mismo punto del que había partido, si el oso estuviera en el punto donde creía haberlo visto al principio, ¿puede matarlo aprentando el gatillo?
6 comentarios:
huy, si no me equivoco, al final está 10 pasos mas al oeste que al principio (aunque en la misma "latitud").
Es decir, fue al sur por un meridiano y volvió por otro 10 pasos más hacia el oeste. Solo mataría al oso si este fuera un oso polar (del mismo polo)... pero en el polo sur no hay osos.
(Todo el mundo sabe que los osos son del mismo polo que las liebres y los linces. ;-) )
jaja, buena respuesta de Amio, solo los seguidores de De Mairena lo entenderán!
como canta Serrat, "los tengo muy escogidos, son lo mejor de cada casa"
(ustedes se dieron cuenta que el cazador era una liebre?)
No entiendo nada. Si va 10 al sur, 10 al oeste y 10 al norte, y volvió al punto de partida, está en el polo norte, y la dirección de la escopeta se modificó en un ángulo de 60º. ¿Que el cazador era una liebre? Demasiado hermético el chiste. Loco, a ver si se ponen las pilas ;)
eh... eso de 60 grados me preocupa, ¿los calculaste y dio eso?
Me dio 60, porque pi vale 3 según la biblia ;)
"Hizo luego un mar de metal fundido, de diez codos de borde a borde; era perfectamente redondo, de cinco codos de altura, y un hilo de treinta codos ceñíale alrededor."
Reyes I, 7
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