6.4.05

860.- T, MC, y otras yerbas (III)

En su comment, Laura señala un punto sobre el que escribió Poincaré en "Ciencia y Método" (el mismo libro donde está el texto que mencioné acá). Según el, fue Tolstoi quien sostenía que la "ciencia por la ciencia" es una concepción absurda, ya que

    no podemos conocer todos los hechos, puesto que su número es prácticamente infinito. Es preciso elegir desde ahora. ¿Podemos regular esta elección sobre el simple capricho de nuestra curiosidad? ¿No vale más dejarnos guiar por la utilidad, por nuestras necesidades prácticas, y sobre todo morales? No tenemos otra ocupación más interesante que la de contar el número de mariquitas que existen sobre nuestro planeta?


(Aclaremos que esta última objeción no lo es a los programas de chimentos, sino que se inscribe dentro de una tradición a la que podemos unir a Rutherford: "toda ciencia es o física, o filatelia")

Poincaré aclara que con 'utilidad' no se refiere al sentido comercial, sino a aquello que puede mejorar al hombre. Y agrega:

    Yo, y es necesario que lo diga, no me contentaría ni con lo uno ni con lo otro; no querría ni esta plutocracia ávida y limitada, ni esta democracia virtuosa y mediocre, únicamente ocupada en exponer la mejilla izquierda, y en la que vivirían sabios sin curiosidad, los cuales, evitando los excesos, morirían no de enfermedad, pero si de fastidio. Mas este es un problema de gustos.


Y esta elección de hechos a explicar es lo que considera el problema central de la investigación científica.

Lo peor, tal vez, es que esta elección depende mucho de la época, y lo que en un momento se consideraba imprescindible, al siguiente nos puede parecer ridículo, o inmoral. En la época de Poincaré este tipo de cambios no se daban dentro de una misma generación. En el siglo XX, estas marchas y contramarchas se pudieron ver en un mismo científico, como cuando Einstein -que en la década del '30 no llegaba a comprender del todo la cuántica- supo interpretar sus implicaciones y escribió aquella carta impulsando el desarrollo de la bomba atómica, para arrepentirse después del monstruo que habían creado.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Un problema que se enfrenta es que mirando para atrás descubrimos qué fue útil, pero mirando para adelante no es fácil decir qué va a serlo. Sin contar que es imposible saber las ramificaciones que tendría si llegara a ser útil.
El umbral entre el genio y el delirante.
Igualmente aunque no podamos definirlo en forma absoluta, creo que en la trayectoria de una investigación "seria" siempre se plantea adonde le gustaría llegar y el encaje o no con un contexto ya "probado". Y tiene en mente una realidad y una utilidad. Mientras que una seudociencia dice: ya llegamos aunque ud. no quiera o pueda verlo.
Una cosa tiene el beneficio de la duda por la falta de información y puede llegar a ser fruta. La otra es fruta.

JuanPablo dijo...

m., supongamos que nos plantemos el siguiente problema: la información que cae en un agujero negro... ¿queda oculta para siempre para el universo exterior, aún en caso de que el agujero negro se disuelva y desaparezca?

¿lo clasificás como 'dudosa por falta de información' o como 'fruta'?

Anónimo dijo...

Maver (haciendo pedalear al hamster en mi cabeza): Supongamos que la hipótesis es que la información queda oculta para siempre. Me pelo y hago un modelo bla bla y publico el paper (consiguiendo que unos referís midan la coherencia o empalme con los modelos existentes). Un observador escéptico tendría que declararse al respecto fruta agnóstico. No tiene material para falsearlo. Pero podría intentar encontrarlo en un futuro. Hay elementos para ello, por más que estén lejanos, porque hay modelo sobre un fenómeno que puede dejar de ser virtual en cualquier momento.
Si tuviésemos que decidir un subsidio a ese tema discutiendo si es útil o no. No tenemos forma, excepto si lo comparamos con temas obscenamente útiles.
Si tuviésemos que decidir si es pensamiento científico. Diría que tiene todos los ingredientes.
Si el modelo no fuese coherente hacia atrás, creo que sería rechazado. Tendría que esperar algun cuerpo de datos para pelear, para no ser más que una especulación valiente.
Si existiese otro modelo coherente pero opuesto en su resultado, cómo dirimir entre ambos ? Esa instancia se parecería a la Teología en la forma pero no en los fines.

Sirven estas ramificaciones para el tema ? Sino borralas :)

JuanPablo dijo...

creo que sirven... Interesante lo de la coherencia: la física 'clásica' da una respuesta, la cuántica da otra.

Con eso, olvidate de falsearlo: esperar que desaparezca un agujero negro, saber qué entró, medir lo que salga:

"There is a problem describing what happens, because strictly speaking the only observables in quantum gravity are the values of the field at infinity. One cannot define the field at some point in the middle, because there is quantum uncertainty in where the measurement is done."

Una perlita: en la solución del problema ése aparece cierto cálculo de una integral... que nadie sabe siquiera cómo se define (no hablemos de cómo se calcula).

"So what do we do? We just add up a few of the answers, cross our fingers, and hope for the best! If this procedure offends you, go do something easy like math."

Si bien con las frases anteriores ya podés encontrar de qué se trata todo, agrego algo sobre el tema: dos personas A y B le apuestan a otra C sobre la respuesta de esa pregunta; A dice encontrar la solución, y se declara perdedor, aunque advierte que B no está convencido. A le paga la apuesta a C, y éste declara: "Para ser honestos, no entendí".

Ahora: ¿ciencia o teología?

Anónimo dijo...

La verdad que me hiciste googlizar. Vi que se trata aparentemente de una discusión entre Hawking, Penrose y esos seres abstractos.
Ahora, que yo no siga el hilo de lo que están hablando puede sugerir que no sea útil. Sacado de contexto, pueden efectivamente ser especulaciones mentales con el mismo grado de irrealidad que otras que mencionás en otros campos del pensamiento.
Tanto como la relatividad para el que no hace nada cerca de la velocidad de la luz. No puedo anticipar que el estudio de esas entidades -ahora virtuales- no sirvan para alguien a futuro. De hecho, mucho de lo que utilizamos viene del mismo tipo de usina. Y lo usamos en tecnología aún cuando es interés de pocos si el electrón es una onda o una pelotita.
Tampoco pude ver ornitorrincos, y eso que nos fuimos al río de la puta madre para verlos. Pero aún leo sobre ellos y si los viera conozco sobre su comportamiento gracias a la investigación científica. En este universo.
En otro por ahí me arrepienta de haber sido ateo. Sin contar que si me cremaron y todos resucitan en sus cuerpos va a ser una lástima perdérmelo. :)

Anónimo dijo...

Digo, te molesta la soberbia o arrogancia del pensamiento científico. A mí tambien. Pero me sigue pareciendo la mejor herramienta para discutir sobre este universo, en el que existis para todos nosotros, pienses o no.

JuanPablo dijo...

la verdad, más que la arrogancia de la ciencia, me molesta la de los cientificistas (la ciencia en sí me parece recontra respetable, más allá de la posición de abogado del diablo que estoy tomando acá).

yo creo que la gracia de la ciencia es su capacidad predictiva y explicativa. Ahora, si se reduce todo a la contrastación, podríamos decir que las teorías científicas son inútiles, ya que entonces todo el conocimiento proviene de la experiencia (se pierde el caracter 'predictivo'), y en lugar de proponer explicaciones, se transforma en descriptiva.

En el caso éste de H. y compañía, el tema no es contrastable ni por las tapas, y teóricamente, (según un teorema, creo que de Carlsson) no es -ni será- calculable! Pero me costaría mucho -a mí- descalificarlo como ciencia...